El taller “Ciencia para una agricultura sana y soberana” destacó la importancia de bioinoculantes para robustecer el sector agroalimentario del país de la mano de científicos, investigadores y productores.
En una actividad desarrollada en el Auditorio «Tobías Lasser» de la Universidad Central de Venezuela (UCV) en Caracas, investigadores, biólogos e ingenieros agrónomos, explicaron a detalle la trascendencia del proyecto sobre el tratamiento de semillas de maíz con insumos biotecnológicos.
La coordinadora del laboratorio de Nutrición Mineral de Plantas Silvestres del Instituto de Biología Experimental (IBE) Dra. Alicia Cáceres, disertó sobre la importancia de los microorganismos del suelo para la producción.
“Los microorganismos del suelo constituyen una alternativa importante “para sustituir todo lo que es químico” en los procesos agrícolas.
Asimismo, dijo que con los aportes de “representantes de Codecyt, ingenieros, biólogos (…) nos permiten empoderar a los productores de conocimiento y consolidar una agricultura sustentable”.
Por su parte, la ponencia del investigador Blas Dorta, hizo referencia a la tecnología de tratamiento de semilla y las acciones que han emprendido con el proyecto con biocontroladores.
“El tratamiento de los suelos antes de la siembra, con productos controladores, lo hacemos básicamente para prevenir ataques por hongos fitopatógenos”, dijo.
Asimismo, explicó que “en el tratamiento biológico de semillas intervienen microorganismos o consorcio microbiano; polímero adherente; colorante y agua”, la relación de estos componentes ofrece un acondicionamiento biotecnológico para las semillas de maíz y les permite obtener resultados positivos en los cultivos.
Dijo que este proyecto lo están “llevando a gran escala para que pueda tener significancia a nivel nacional en términos de producción. Ese escalamiento lo estamos haciendo con el auspicio del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la mano de la Alianza Científico-Campesina, con la intención de promover un agricultura sana y sustentable”, puntualizó.
Por su parte, el ingeniero agrónomo Luis Piñango, disertó sobre los principios de manejo integrado de plagas.
Al respecto, comentó que “los problemas de plaga en el cultivo de maíz están siendo atendidos a través de la Alianza Científico- Campesina y la empresa Agrobiotech”.
Precisó que actualmente están impulsando un proceso de enseñanza dirigido a productores con el objetivo de “mostrar los beneficios del manejo sustentable de la agricultura que impacta positivamente en la salud y en los costos de producción”.
En el encuentro, también estuvieron presentes estudiantes de la Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos (UNERG), personal técnico de la Corporación para el Desarrollo Científico y Tecnológico (Codecyt), representantes del Centro Nacional de Tecnología Química (CNTQ), entes adscritos al Mincyt, entre otros.
Compromiso de la Ciencia con la agricultura
Carla Contreras, gerente de Estudios y Desarrollo de Proyectos de Codecyt, resaltó el trabajo mancomunado del sector ciencia con los productores agrícolas del país.
“Desde Codecyt nos hemos dado la tarea de consolidar el trabajo con el sector agroalimentario para hallar la solución a las problemáticas del sector y proporcionar esas tecnologías que se han desarrollado en los laboratorios para que lleguen a los productores y a las familias campesinas”, destacó.
Asimismo, sostuvo que entre los principios de la Alianza Científico Campesina destaca la organización social de la producción, el reconocimiento de los saberes ancestrales y la participación de la mujer en los diferentes espacios para la producción, como herramientas fundamentales para robustecer la soberanía agroalimentaria de Venezuela.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Amarilis Palacios/ Fotos: Anthony Araque.
