Actualmente, el mundo se enfrenta a desafíos ambientales urgentes. Por tanto, la ciencia y la tecnología se han convertido en aliados indispensables en la búsqueda de soluciones innovadoras.
Uno de los campos que está experimentando avances extraordinarios es el de los nanomateriales funcionales de carbono y el de los composites o resinas compuestas, logrando ser una esperanzadora alternativa ecológica.
Los nanomateriales de carbono, como los nanotubos, las nanofibras y los fulerenos, son sustancias que se componen de diminutas estructuras de carbono altamente modificables. Estos materiales tienen propiedades extraordinarias que los convierten en catalizadores eficientes y respetuosos con el ambiente para la generación de productos químicos esenciales.
Un reciente artículo publicado en el portal web The Conversation destaca el potencial transformador de estos nanomateriales de carbono en la promoción de prácticas sostenibles y la economía circular.
El texto escrito por diversos especialistas de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), en España, explica que estos avances representan un cambio significativo en sectores como la industria agroalimentaria, perfumería, farmacéutica y la conversión de biomasa vegetal que comúnmente usan métodos convencionales que son altamente contaminantes.
En la industria alimentaria, señala que los nanomateriales permiten el desarrollo de ingredientes naturales y sostenibles, reduciendo la dependencia de aditivos químicos dañinos.
Además, apunta que tienen la capacidad de convertir la biomasa vegetal en productos valiosos, fomentando así la economía circular y disminuyendo la necesidad de explotar recursos naturales limitados.
Mientras tanto, en el ámbito de la bioeconomía, que busca aprovechar al máximo los residuos y subproductos, los nanomateriales de carbono desempeñan un gran papel.
“Estos materiales tienen la capacidad de actuar como catalizadores para convertir la biomasa vegetal en otros productos, lo que fomenta la economía circular y reduce la necesidad de explotar recursos naturales limitados”, reseña el artículo.
Destaca que en lugar de considerar la biomasa como un mero residuo, se trata de convertirla en una fuente valiosa de materias primas sostenibles
Además, indica que los nanomateriales de carbono también impulsan la gestión sostenible de recursos naturales y la protección del ambiente, ya que permiten la síntesis de productos químicos de manera más eficiente y con una menor contaminación.
“Esto se traduce en una reducción de la huella ecológica en la extracción y procesamiento de recursos naturales, lo que es esencial para combatir los desafíos actuales de consumo de la población mundial, de agotamiento de recursos y el cambio climático”, puntualizan.
Los autores concluyen que “la combinación de investigaciones experimentales e inteligencia artificial está allanando el camino para las síntesis de catalizadores más eficientes y procesos más respetuosos con el ambiente”.
Agencias Internacionales.