Venezuela cuenta con hermosos paisajes acuáticos, ricos en gran diversidad biológica y ecosistemas de alta fragilidad; una de ellas es la bahía de Mochima, ubicada en la región Nororiental del país, de acuerdo con sus características ecológicas, los investigadores de la Fundación Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) se han planteado realizar un estudio sobre la calidad de agua con respecto a la presencia de cianobacterias y cianotoxinas.
El biólogo César Rivera, de la Dirección de Energía y Ambiente será el encargado de realizar esta investigación titulada “Detección e identificación molecular de cianobacterias y cianotoxinas en labahía de Mochima del estado Sucre”, que tiene como objetivo emprender soluciones a los problemas ambientales y sanitarios de esta importante región del país, especialmente sobre el ecosistema marino y costero.
Explicó, que las cianobacterias (o algas verde-azules) son microorganismos fitoplanctónicos, que presentan una distribución geográfica muy amplia, que tienen importancia ecológica y evolutiva, porque generan gran parte del oxígeno de la atmósfera. Por su parte, las toxinas producidas por las especies tóxicas son llamadas cianotoxinas, que se consideran los compuestos más tóxicos y preocupantes en las masas de agua.
Agregó, que nutrientes, como el nitrógeno y fósforo, aportados por escorrentías agrícolas, urbanas y efluentes de las estaciones de tratamientos de aguas residuales, proporcionan las condiciones para la proliferación de estas algas en las masas de agua, dando lugar a la eutrofización y a zonas muertas en ecosistemas acuáticos, generando problemas ambientales como la disminución del oxígeno disuelto en el agua.
“Las cianotoxinas pueden causar graves problemas de salud en seres humanos y animales, incluyendo daño hepático, irritación de la piel, trastornos gastrointestinales y neurológicos; pueden contaminar las fuentes de agua potable, lo que puede afectar la calidad y el sabor del agua”, dijo.
Rivera mencionó que las cianotoxinas tienen efectos devastadores en el ecosistema acuático, incluida la muerte de peces y otros organismos, que a su vez tiene un impacto negativo en la economía local, especialmente en la bahía de Mochima, que es un área que depende del turismo y la pesca.
El biólogo refirió que el ensayo a realizar en este estudio consiste en evaluar especies extraídas por la Estación de Investigaciones Marinas Mochima de la Fundación IDEA, ubicada en el estado Sucre, que serán llevadas al laboratorio para la detección molecular y amplificación del gen de la toxina, para la deteccion de la cianobacteria y la toxina en el agua.
“La detección y el monitoreo de estos organismos y sus toxinas permiten tomar medidas adecuadas para proteger y mejorar la calidad del agua en nuestras comunidades. Además, de proteger los ecosistemas acuáticos”, enfatizó.
Rivera resaltó la importancia de esta investigación porque a su juicio es un aporte para que en el país haya aguas recreacionales limpias y libres de toxinas menos perjudiciales. Además, de emprender una ruta para el establecimiento de una legislación y normas, como se han implementado en otras naciones, siguiendo el ejemplo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que trabaja en un programa para combatir el efecto de las cianobacterias y cianotoxinas.
Texto: Hernán Romero (Prensa IDEA) Fotos: Rolando Gonzalez (Prensa IDEA)