Mi historia con la ciencia comenzó desde muy niña, observando la naturaleza, sus formas, junto a mi padre Rafael. Considero que no existe una maestra tan pedagógica como la naturaleza.

En los verdes y los azules del mar me topé con tantas preguntas, una diversidad que estimulaba mi curiosidad de una forma muy divertida, encontré la alegría en las formas y expresiones geométricas del entorno.

Las plantas pueden generar formas geométricas sorprendentemente regulares, en la mata de uva de playa (Coccoloba uvifera), de hojas casi circulares, originaria de las costas del Caribe y América tropical, hacía con mis padres cucuruchos, estructuras cónicas, donde resguardaba las frutas para llevar a casa y compartir en familia.

Encontré las Hormigas León entre el monte y la tierra, comencé con la lupa de mi abuelo a observar y aprender; observar es más importante que sólo ver.

En la Universidad conocí que aquello que llamaba mi atención desde niña al observar las plantas, guardan relación con la sucesión de Fibonacci y con el número áureo. Que grata sorpresa las matemáticas en mi vida.

Aprendí que las plantas desarrollan sus ramas y hojas siguiendo la secuencia de Fibonacci. Las flores también presentan sus pétalos bajo el mismo patrón: Los primeros números de la secuencia son 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, etc.

Llegó la Era de la Biología Celular y en la Universidad la asumí como especialidad, más interesada en la ultraestructura de la vida, la célula,  y los procesos moleculares, la microscopía para observar nuevamente, quería mirar más y más.

Han pasado los años y tuve la fortuna de estar cerca de tantas mujeres científicas, investigadoras, innovadoras, curiosas también, a todas las recuerdo con especial regocijo y orgullo.

De tantas vivencias en la Ciencia, puedo expresar que una carrera científica no es una línea recta, por el contrario, tiene tantas curvas y pendientes, que solo la sorpresa ante el hallazgo y la compresión de un fenómeno tiene el poder de robar el habla y hasta la respiración, ¿cómo explicaría la termodinámica esto?.

No fue una línea recta, han sido múltiples puntos en el camino, con encuentros, enseñanzas y aprendizajes, cada día el proyecto ha sido el mismo, el nuestro, venezolano totalmente, creativo y riguroso a la vez, en la dinámica de buscar y encontrar más respuestas para todos.

Con nuestra estética y ética, con el gusto especial en el diálogo de los Saberes, del Saber con ciencia, del sueño viviente de ser militante la Alianza Científico-Campesina; una expresión y práctica de la Revolución Bolivariana donde la Ciencia es de tod@s.

PD: Las Hormigas León son insectos pertenecientes al orden de los Neurópteros. No se trata de verdaderas hormigas, aunque sus pequeñas larvas que pueden alcanzar 1 cm de longitud pueden recordarnos a ellas. Son fieros depredadores de estas, y de otros pequeños insectos  que comparten con ellas los suelos arenosos normalmente de ambientes calientes.

Ministra del Poder Popular para la Ciencia y la Tecnología, Gabriela Jiménez Ramírez