La vicepresidenta Sectorial de Ciencia, Tecnología y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, ofreció este jueves una clase magistral a estudiantes del doctorado para la Defensa Integral de la Nación, del Instituto de Altos Estudios de Seguridad de la Nación (Iaesen) del Ministerio para la Defensa, donde resaltó la importancia de poner el conocimiento científico al servicio del pueblo para avanzar en la transformación del país.
En este sentido, refirió que, actualmente, los debates se centran en la coexistencia del ser humano, la naturaleza y las nuevas tecnologías, para garantizar el desarrollo de las naciones con acciones que permitan hacer frente a los desafíos que están por venir.
“Lo que se discute es los paradigmas a desarrollar, el de la sostenibilidad, en donde estos tres elementos están simplemente relacionados y dependientes. Entonces colocamos la sociedad como un elemento determinante y donde la naturaleza se desarrolla en la sociedad”, expresó la también ministra para Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez Ramírez desde las instalaciones del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
Para esto, resaltó los avances científicos alcanzados durante la Revolución Bolivariana, a través de la Asociación de Productores Integrales del Páramo (Proinpa), una institución que tiene 25 años trabajando en el desarrollo de sistemas de producción agroecológicos, respetuosos con el ambiente, que garanticen la soberanía alimentaria de la población venezolana.
Recordó que esta institución, ubicada en las montañas de Mucuchíes, estado Mérida, está conformada por los productores de la zona y se ha convertido en un actor clave en la consolidación de la producción de semillas soberanas para el país, gracias al apoyo del Gobierno Bolivariano, a través de la Alianza Científico-Campesina.
“Encender el poder del conocimiento y el derecho a comprender debe ser una de las políticas para la transformación del país”, puntualizó.
De igual forma, se refirió al laboratorio del Centro Biotecnológico para la Formación en la Producción de Semillas Agámicas (CEBISA), un espacio que próximamente recibirá la acreditación como Laboratorio tipo II por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Recalcó que, en Venezuela, se reconoce los poderes del conocimiento ancestral y el conocimiento de esta ciencia para el desarrollo de la nación.
“Se han construido nuevos modelos para la inclusión, para la productividad, para el conocimiento. Cuando se las transfieres a Proinpa, a una comunidad, el diálogo de los saberes tiene que ser efectivo y debe ser horizontal la transferencia de tecnología del conocimiento”, enfatizó.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Ariadna Eljuri/ Fotos: Francisco Tría